Primer dia de busqueda.

David Sheen

Al dia siguiente de la entrevista con el oficial.



-Vamos vamos, no creo que lo crea realmente- me consoló Alex.
-Es que debiste de haber visto como me hablo. Mas va le que la encontremos viva.- traté de imitar la voz del oficial.
-Yo creo que solo es por que eres su novio y...-me trato de consolar de nuevo.
-El primer sospechoso.- le dije desanimado. Alex frunció el entrecejo y yo traté de sonreirle.
Mi hermana y yo nos habíamos cuidado el uno al otro desde que nuestro hermano pequeño Jason había muerto víctima de leucemia.
Por eso varios de mis amigos creian que había madurado precipitadamente. Yo no lo creía así.
El pensar todos los días: La vida no es tan larga, puedes morir en cualquier momento, puede que esta sea tu ultima oportunidad. No era para nada agradable. Por eso soportaba con paciencia todos lo berrinches de Kathy y bueno la quería, muchos decían que parecía su papá atrás de ella siempre y por eso ahora estaba muerto de preocupación.
Había visto al Señor O´Toole decirle a su mujer: "Ya era hora de que supieran lo alcohólica".
Y la señora O´Toole había llorado histericamente.
Por eso ahora estaba con Alex dando vueltas por la ciudad para ver si veíamos su auto o a ella tirada en algún callejón.
-La vamos a encontrar- me dijo Alex al notar mi preocupación.
-Gracias Alex.-le dije y le puse mi brazo derecho en sus hombros.
-Pero quiero que sepas que lo hago por ti.-me dijo enojada.
Ella había querido siempre ser la mejor amiga de Kathy, pero después de que empezamos a andar ella fue cambiando su opinión acerca de ella.
Para Alex, Kathy era una malcriada, mal agradecida, mala hija y otros adjetivos que no le gustaría que mi mamá escuchara.
-Ok- le conteste amargamente y me aparté.
-Oh vamos-me suplico- si dijera otra cosa sabrías que no es verdad.
-Lo se y por eso estoy enojado.- le dije evitando su mirada- si la conocieras mejor...
-¡Abre los ojos! Mi papá te regaño por los 1000 Dlls. Y no creo que tu compres bolsos Gucci ¿O si?
-No, pero a ella le encantan.
-¡Oh! Es imposible hablar de ella contigo, eres un cabeza dura.
A veces me gustaba la obstinación con la que hablaba mi hermana, le gustaba dar consejos, ser una líder, pero incluso yo sabia que ella no era mandona como Kathy, Alex no inspiraba miedo.
-Muy bien... tengo una idea- le dije mientras pensaba en como ponerla de buen humor.
-¿Que?- me dijo aun enojada.
-¿Quieres comer comida china?- le dije sonriendo.
-Mmmm.... Solo si tu pagas.- me respondió sonriendo.
-Lo tuyo no son las bolsas Gucci, es la comida china.- le dije mientras reia.

Nos dirigimos a mi auto y ella corrió al asiento del copiloto y yo arranque.
Llegamos al Chinatown media hora después. La ciudad estaba muy lejos de la playa pero como nos encantaba ir a comprar comida buena, ir a ver a algún partido de fútbol, etc...
Y los citadinos hacían todo lo contrario, ellos iban a la playa cada vez que podían.
Me estacione a lado de un Mercedes negro y nos bajamos.
En frente de el estacionamiento había un bar que tenia letreros de neón y cada vez que se abría la puerta se podía ver que estaba lleno el lugar. Me voltee hacia el restaurante de comida china que estaba detrás de mi cuando escuche:
-Saquen a esta muchacha de aquí, no quiero problemas legales.- dijo un hombre muy gordo con camisa negra que estaba deteniendo la puerta abierta para que dos hombres de unos 20 años sacaran a una muchacha delgada de mi edad, ella estaba completa mente inconsciente, la colocaron en el suelo de la acera. Fue entonces cuando vi quien era.